La cultura del “tapeo” está extendida por todo el país. Las tapas son una seña más de nuestra identidad y es que vayas a donde vayas, siempre encontrarás un bar que te ofrecerá tapas para acompañar tu bebida. Madrid, siendo la capital de nuestro país, es una ciudad experta del tapeo, por eso te vamos a presentar las tapas más típicas de Madrid y sobre todo donde tienes que ir a probarlas. El post de hoy, «Tapeando por Madrid» es, de hecho, una ruta gastronómica por los bares y restaurantes más típicos. Algunos de estos bares te pueden parecer un poco antiguos o hasta cutres, pero te aseguramos que nos te defraudará, hoy no se encuentra en cualquier lugar un bocata de calamares de calidad ;).
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Las tapas en el norte de España, se traducen en “pintxos”, y son típicos del País Vasco, Navarra o Asturias. Son pequeñas rebanadas de pan acompañadas con productos típicos y de la cocina vasca como la merluza, el bacalao, las anchoas o los chipirones y los hay desde los más sencillos hasta los más vanguardistas. Pero si nos vamos a la capital, las tapas de rabas, tortilla de patatas o torreznos están a la orden del día y son un bocado indispensable para todo aquel que vaya de visita a Madrid.
Tapeando por Madid: las tapas clásicas en el centro
Empezamos esta ruta por el centro turístico de la ciudad como es la Puerta del Sol. Casa Labra se encuentra a escasos minutos de la Puerta del Sol desde 1860. Aquí debes probar los ‘soldaditos de pavía’, hechos a base de bacalao rebozado, y sus famosas croquetas.
Es un local con historia, pues aún conserva su decoración original, su fachada en forma de curva y el rótulo de cristal tan característico de los establecimientos de la época. Buscar parking por la zona es una ardua tarea y a veces resulta imposible, así que mejor reservar tu plaza de parking en Madrid Sol con Onepark.
A medio camino entre Sol y la plaza Mayor puedes hacer una parada en el Bar Postas y probar sus tapas tradicionales como su pescaíto frito. Si llegas con hambre, puedes comer uno de los famosos bocadillos de calamares, los más conocidos de toda la ciudad.
Si te alejas un poco del centro, encuentras Docamar, un bar con medio siglo de historia que atrae a todos por sus increíbles patatas bravas.
Tapeando por Madrid por el Barrio de las Letras
Esta zona de Madrid es conocida por su indudable carácter histórico-cultural y sus calles repletas de locales gastronómicos. La Venecia, por ejemplo, situado en pleno Barrio de las Letras, es un lugar que a todo amante del buen vino le gustará. Tiene una amplia variedad de vinos de jerez que puedes acompañar con embutidos, quesos, huevas y mojama.
Encontrar parking en el barrio de las letras es complicado, teniendo en cuenta que muchas de sus calles son peatonales, de ahí que muchos parkings suban sus tarifas y la gente vaya en busca de parkings low cost. Si no quieres correr ese riesgo, reserva tu plaza de parking con Onepark.
Sin salir del Barrio de las Letras, también se sitúa Casa Manolo con sus famosas croquetas de jamón, los huevos rotos de El Roto y la Cervecería Alemana en plena plaza Santa Ana para sorprendernos con sus tapas de croquetas, callos y tortilla.
Las tapas de La Latina
Actualmente La Latina es una de las zonas más jóvenes de Madrid. Conviven la tradicionalidad y el espíritu más castizo de la capital con un ambiente multicultural y alternativo. Es por eso por lo que muchos bares han empezado a innovar en sus tapas, logrando combinaciones increíbles y con sabores únicos. Así que ya sabes, si lo que quieres son probar las tapas más vanguardistas de Madrid, debes ir a La Latina.
Como local tradicional con los callos como especialidad, tenemos La Chata. En Juana La Loca podremos degustar sus aclamados pinchos de tortilla de patata con cebolla confitada y dejarnos sorprender con los platos de La Musa.
Tapeando por Madrid: Última parada
Y como no podía ser de otra forma, tapeando por Madrid elegimos nuestra última parada en la capital: El Mercado de San Miguel. Aquí se concentran una multitud de pequeñas paradas donde poder comprar productos frescos y gourmet y parar a hacer una tapa con un buen vino. Eso sí, debido a la afluencia de gente, este bocado lo tendremos que hacer de pie.
Como ves, Madrid tiene una potente oferta gastronómica, es momento de descubrirla con tus propios ojos (y paladar). Reserva ya tu parking con Onepark y disfruta de una experiencia completa sin preocuparte de dónde dejar tu coche.