Si tu coche duerme en el exterior, puede verse afectado por las temperaturas de fuera, por eso no te olvides que hay que mimarlo para que se mantenga en perfecto estado. Algunos consejos para saber cómo cuidar tu coche y no tener que preocuparte por no tener un garaje. Si sigues estos consejos y verificas tu vehículo con frecuencia, que duerma en el exterior ¡ya no será un problema!
Proteger el coche
Lo primero y que puede ser muy eficaz, sobre todo en épocas de frío, es comprar una funda para el coche. Esto le protegerá, aunque no sea igual que un garaje, pero ya protege el exterior y una parte del interior del coche. No podemos garantizar que la parte mecánica esté protegida de la misma forma, pero como todo: es mejor que nada. Hoy en día se encuentran fundas de coche y también para las ruedas en muchos sitios y su coste no suele ser muy alto, dependerá del modelo que prefieres. En verano también puede ser eficaz, ya que el sol calienta mucho el coche, encontrar un sitio en la sombra y que esté expuesto lo menos posible al calor.
También hay que tener en cuenta donde estacionamos el coche, porque debajo de los árboles no suele ser una buena idea. Hay épocas donde estacionar debajo de un árbol equivale a encontrarse el día siguiente el coche lleno de hojas, palo u otros desechos sobre el coche, lo que puede dañarlo. Por eso te proponemos proteger el coche desde fuera con una lona.
Cómo cuidar tu coche: la pintura
Si por algún casual no has podido comprar una lona, o por la razón que sea no puedes proteger el coche de esa forma hay que pensar en la pintura. Cuando un vehículo pasa mucho tiempo fuera, y sobre todo sobrevive a temperaturas altas o el cambio de temperatura entre el día y la noche, la pintura puede sufrir daños importantes. Por eso debes mantener la pintura sellada con cera regular, y verificar que no se desgasta o se despega. Esto ayudará a mantener el exterior de tu coche protegido del calor y del clima.
El exterior es importante, pero el interior también
En verano el interior del coche puede verse afectado, ya que partes esenciales para la conducción como el volante los asientos o la palanca de marchas pueden quemar. Entonces te aconsejamos invertir en protectores de sol reflectantes, ya que es una forma fácil de mantener el interior fresco y cómodo. Se ha podido demostrar que el protector consigue reducir la temperatura del coche, el protector más utilizado es el delantero para proteger la parte del conductor, pero hoy en día se puede encontrar para todo el coche, para proteger al resto de los acompañantes. Aun así, hay que tener cuidado en no quemarse porque hay zonas metálicas que aun así pueden provocarnos quemaduras si el vehículo no está totalmente protegido.
Cómo cuidar tu coche verificando su parte mecánica
La parte mecánica del coche es la que no vemos, pero eso no quiere que no se pueda ver afectada por el tiempo. Es muy importante revisar los líquidos del coche, ya que en invierno tienen riesgo de congelarse y de esta forma ralentizar todo su funcionamiento. Un consejo es arrancar el coche, dejar que se caliente el motor y los líquidos y después avanzar, así el coche sufrirá menos.
Frenos
Otra parte muy importante son los frenos que en verano pueden verse afectados por las altas temperaturas, y al ser un elemento esencial para nuestra seguridad hay que verificar siempre que todo está bien al respecto. Lo que puede suceder es que los frenos se sobrecalienten, ya que de por si la acción que producen (el rozamiento de las pastillas contra el disco, para detener el coche) genera calor. Por lo tanto, si no tenemos cuidado, teniendo una conducción poco agresiva y verificando de vez en cuando que están bien, se pueden deforman los discos o tener problemas con el líquido de freno.
Neumáticos
Por último os queremos recordar que los neumáticos como los frenos son elementos esenciales, entonces hay que darle bastante importancia a su estado. Suelen verse más afectados en las épocas de calor, ya que su desgaste es mayor por las temperaturas. Por eso hay que revisar que las ruedas no estén desgastadas y que tengan la presión adecuada. En verano suele ser cuando hacemos más viajes con el coche, por eso es necesario revisarlas con frecuencia, para no pinchar o tener algún problema mayor durante nuestra conducción.
Cómo cuidar tu coche: límpialo como si fuera tu casa
Lavar el vehículo regularmente es importante para eliminar todos los desechos, poder ver bien a través de los cristales, para una buena conducción y también para el mantenimiento de la pintura. Por otro lado, en verano, el hecho de limpiar el exterior e interior del coche ayudará a refrescar para que sea más cómodo al conducir. Hay que saber que no es buena idea lavar el coche cuando el sol pega más y dejarlo secar al aire libre. Las gotas de agua, de hecho, se pueden quedar grabadas en la superficie del coche y, con el calor, el agua se evapora más rápido y puede provocar el efecto contrario que el de refrescar.
Cómo cuidar tu coche: los extras
A parte de todos los objetos que hemos podido citar hay otras medidas para mimar nuestro coche. En el caso que haga mucho frío y nieva lleva contigo una rasqueta para el hielo en los cristales, cables de arranque, un cepillo rascador y cadenas. El resto puede ser: una rueda de repuesto y kit de reparación, bombillas de repuesto o una linterna.
Revisión
Por último, lo más importante es que pase todas sus revisiones obligatorias que marca la normativa vigente (aquí para saber más sobre la ITV). Si cuidas bien tu coche, no necesitas un garaje, el mantenimiento regular ayuda mucho a protegerlo.
En cualquier caso siempre tendras Onepark para dejar tu coche en buenas manos y no preocuparte si está en el exterior. Es muy sencillo, visita nuestra página web, elige el parking y reverva.